Jesús nos dice que somos sal de la tierra, luz del mundo, que nosotros estamos llamados a vivir como El, una justicia nueva: ese comportamiento de los hijos de Dios, como un obrar nuevo.
Habéis oído que se dijo, pero Yo os digo , y nos plantea el modelo del Padre, los hijos podemos vivir como el Padre : ser perfectos, como vuestro Padre celestial es perfecto.
Jesús entra como un poco en el secreto de la conciencia de los hijos de Dios: los hijos pueden obrar así, porque viven de Cara al Padre.
No viven de Cara a los hombres: cuidad de no practicar vuestra justicia delante de los hombres, vistos por ellos … de lo contrario, no tendréis la recompensa del Padre Celestial, que está en lo cielos, que está en lo Secreto.
P. Horacio Bojorge - Las Bienaventuranzas,Catholic.net
No hay comentarios:
Publicar un comentario